Estas salas suelen encontrarse en guarderías, centros infantiles o instalaciones similares donde se brinda cuidado y atención a los niños mientras sus padres trabajan o realizan otras actividades.

La sala de lactantes está especialmente equipada y adaptada para proporcionar un entorno seguro y estimulante para los bebés. Algunas características comunes de estas salas incluyen:

  1. Cunas y áreas de descanso: Las cunas son esenciales para que los bebés puedan descansar y dormir cómodamente durante el día.
  2. Áreas de juego: Se incluyen juguetes y actividades adecuadas para la edad de los bebés, que promuevan su desarrollo sensorial, cognitivo y motor.
  3. Espacios para la lactancia: Se reservan áreas discretas y cómodas donde las madres puedan amamantar a sus bebés con privacidad y tranquilidad.
  4. Cambio de pañales: Se disponen mesas o áreas designadas para cambiar los pañales de los bebés de manera higiénica y segura.
  5. Supervisión y cuidado profesional: El personal de la sala de lactantes está capacitado para cuidar a los bebés, atender sus necesidades básicas, proporcionar estimulación apropiada y responder a cualquier emergencia que pueda surgir.
  6. Limpieza y seguridad: Se mantienen altos estándares de limpieza e higiene para garantizar la salud de los bebés. Además, se implementan medidas de seguridad para prevenir accidentes y lesiones.